🔨 Somos las herramientas que usamos

Históricamente, la adopción de nuevas herramientas ha impactado las dinámicas de trabajo y la productividad: 

  • Slack/Whatsapp/Google Chat cambiaron cómo nos comunicamos 
  • Zoom/Meets/Teams habilitaron nuevas formas de tener reuniones
  • Trello/Asana/Notion influyen en cómo nos coordinamos y dividimos el trabajo

En palabras del filósofo Heidegger, las herramientas que usamos sin conciencia reflexiva (lo que él llama “útiles a la mano”) moldean nuestros horizontes de posibilidad.” Traducción para la empresa: No solo “usamos herramientas”, sino que habitamos y comprendemos a través de ellas. 

Desde esa mirada, implementar GenAI no es un desafío sólo práctico, es también una mini-crisis existencial. La pregunta inconsciente de cada trabajador además de “¿Cómo uso GenAI?”, es ¿Qué profesional soy cuando GenAI haga mucho de lo que yo hacía?.

Y esa pregunta no se responde con charlas, capacitaciones o change management.

🤖 Estamos arrojados en la era IA

Siguiendo con el existencialismo alemán, Heidegger también plantea que nunca elegimos el momento histórico en el que nacemos (ni el país, la familia, el cuerpo o el conjunto de tecnologías con las que nos encontramos), él dice que “estamos arrojados al mundo” (Geworfenheit)... es lo que nos tocó. Apareces en el mundo y… sorpresa!! "esta es tu línea de tiempo, deal with it."

Estar arrojados en plena revolución de la IA da vértigo. Los líderes se motivan, tratan de estar al día (lo que es casi imposible) y luego sienten FOMO de que se están quedando atrás. Mientras se escucha fuerte "estamos en una de las re-configuraciones más trascendentales de la historia del trabajo (y de la existencia humana)". 

Los estudios lo confirman: entre 70-85% de CEOs dicen que IA es prioridad para 2025. McKinsey reporta que 78% de empresas ya usan IA en al menos una función. En simple: ningún ejecutivo que se respete puede responder "nada" cuando le preguntan qué está haciendo en IA.

Tampoco significa cultivar amor incondicional por la IA creyendo que va a resolver todas las ineficiencias. Se trata de reconocer que no podemos "des-arrojarnos" de este momento histórico. No hay “control+z” (comando deshacer). No hay un universo alternativo donde la IA no pasó. 

Nos tocó esta época. Toca actuar.

🧭 La intención de negocio

Seth Godin lo explica en simple “ChatGPT NO escribe poemas. Escribe poesía” 

La diferencia es clave. La poesía es el potencial dormido en el lenguaje: los patrones, las combinaciones posibles, la forma en que las palabras quieren bailar juntas. Eso lo puede generar un LLM. Pero un poema emerge cuando un ser humano toma ese potencial y lo moldea con intención, con algo que decir, con un punto de vista que le importa.

El autor argumenta que la poesía es el potencial que vive en el propio lenguaje: la forma en que las palabras quieren bailar juntas, los patrones que emergen cuando el significado se mapea matemáticamente. Pero que un poema ocurre cuando un ser humano toma ese potencial y lo moldea con intención.

De la misma forma, la IA no va a transformar una organización. Va a generar posibilidades de transformación

La diferencia es clave. Las herramientas y los agentes IA van a conseguir la data y crear 50 variaciones de análisis, mapear 1500 tickets de soporte para encontrar patrones, recomendar 25 mejoras en la interacción con clientes. A eso le llamamos "poesía organizacional": el potencial latente en los datos, los procesos y sistemas. Pero "el poema", la decisión real de cuál estrategia implementar, qué patrón realmente importa o cómo actuar sobre las predicciones, sigue siendo humana. Requiere juicio, contexto político, comprensión de la cultura organizacional, coraje para apostar y una intención de negocio. 

Algunas de las habilidades que harán a las personas exitosas en este nuevo contexto son: supervisar la precisión de los modelos, garantizar el cumplimiento normativo/regulatorio, ejercer juicio y gestionar los casos bordes. Por su parte, los líderes tienen el desafío de ser intencionales al entender y rediseñar la manera en que el trabajo se hace para que las personas y los agentes puedan colaborar de manera efectiva.

💡 ¿Cuál es nuestra conclusión?

La conversación por la IA no es lineal

Los proyectos de desarrollo e implementación IA tienen un componente práctico y otro simbólico.

En lo práctico, el punto de partida es mapear los procesos esenciales e identificar los principales dolores de los usuarios. Luego clasificar las distintas promesas según su naturaleza: 

  • Las promesas con baja variabilidad y alta estandarización pueden resolverse con automatización basada en reglas, análisis predictivo o prompts para LLMs
  • Las promesas con alta variabilidad y baja estandarización pueden beneficiarse significativamente de los agentes

En lo simbólico, la organización como sujeto colectivo se enfrenta al desafío de cuestionar sus fundamentos y colaborar para reinventar la forma de trabajar. Este es un trabajo previo a la implementación que muchas organizaciones se saltan.

Un error frecuente: los líderes no analizan con suficiente detalle la red de promesas y conversaciones estables que sustentan el trabajo o se quedan en discursos épicos autorizando herramientas sin ningún diseño que genere beneficios tangibles.

Los proyectos IA expanden las opciones disponibles, pero somos nosotros quiénes elegimos qué hacer con ellas. Los protagonistas no son los algoritmos, son los humanos capaces de rediseñar la forma de trabajar para obtener valor real de la implementación de IA.  

Porque al final, las máquinas nos dan la materia prima. Nosotros creamos la obra de arte.

Sebastian Balmaceda - Fernando Brierley

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