Desde su fundación en 2012, Canva ha hecho una disrupción en la industria del diseño digital con su enfoque en la simplicidad. Lo que comenzó como una startup australiana que buscaba democratizar el diseño se ha consolidado como un referente global, con presencia en +190 países y 170 millones de usuarios activos mensuales (AMU) que crean contenido digital de manera ágil. Con fecha de febrero de 2025, su valor alcanza los US$49 mil millones. 🤯
⛸️ ¿Quién es Melanie Perkins?
Melanie Perkins (más conocida como Mel) es cofundadora y CEO de Canva, un software de diseño gráfico en línea (probablemente tú o alguien de tu empresa lo utiliza y sin dudas has visto muchos posts en redes sociales con diseños hechos en Canva).
Emprendedora con disciplina
Según la revista Australian Financial Review, Mel es la quinta mujer más rica de Australia. Hija de un ingeniero de origen malayo y una profesora australiana, nació el 13 de mayo de 1987 en Perth (Australia). Desde pequeña mostró un espíritu emprendedor y un alto rigor; aspiraba a ser patinadora artística profesional, por lo que se levantaba a entrenar a las 4:30 a.m. Perkins ha mencionado que su experiencia en el deporte le enseñó constancia y resiliencia (“caer y volver a levantarse”), que en esencia fue la forma que tomó su trayectoria empresarial. Su primera experiencia generando ingresos fue vendiendo tatuajes en spray en una feria local y, más tarde, a los 14 años, emprendió su primer negocio: vender bufandas hechas a mano que promocionaba en los mercados de Perth.
Líder con el coraje de correr riesgos
Después del instituto, Perkins estudió comunicación, psicología y comercio en la Universidad de Australia Occidental, donde trabajaba media jornada dando clases particulares de Photoshop e InDesign a estudiantes de diseño gráfico. En este contexto, se dio cuenta de que los estudiantes tenían dificultades para navegar los software de diseño gráfico. De hecho, les costaba cerca de un semestre dominar las funciones básicas de estos complejos programas.
Ante la frustración de los estudiantes, Mel vio una oportunidad de negocio: crear una herramienta de diseño intuitiva, fácil de usar, colaborativa y accesible, que permitiera a las personas diseñar sin necesidad de tener experiencia técnica previa. Con sólo 19 años, Perkins dejó la universidad para emprender su idea de negocio, Fusion Books, una plataforma de diseño que impulsó junto a Cliff Obrecht (su actual marido). Como en toda startup, Mel asumió inicialmente el liderazgo de diversas áreas: servicio al cliente, control de calidad, gestión del producto, marketing...
🖌️ La idea originaria
Fusion Books: la semilla movilizadora
Mel y Cliff fundan Fusion Books en 2006, a fin de proporcionar una plataforma gratuita de diseño para anuarios escolares en Australia. Se inspiraron en la experiencia de la madre de Mel, que era profesora y dedicaba mucho tiempo al proceso creativo de los anuarios. El objetivo de la pareja era resolver la complejidad y falta de colaboración presente en los métodos utilizados por profesores y estudiantes para crear anuarios, como Microsoft Word o Publisher, que requerían intercambiar archivos y cierta habilidad técnica. La propuesta de la empresa consistió en un software en línea que simplificaba el proceso de diseño, pues permitía acceder a plantillas prediseñadas y herramientas fáciles de usar, además de tener la posibilidad de trabajar en equipo de manera colaborativa.
Aunque la plataforma era gratuita, la empresa obtenía ingresos mediante comisiones por la impresión y entrega de los anuarios diseñados por las escuelas, un servicio adicional que facilitaba aún más la experiencia. En esa época, Australia representaba un mercado ideal para la creación y diseño de anuarios escolares, ya que este tipo de producto no era tan accesible. Asimismo, el auge del uso de internet y las plataformas en línea a mediados de los 2000 le permitió a la empresa llenar este vacío en el mercado y resolver un problema real. Por ende, Fusion Books tuvo cuatro ventajas claves:
- Un mercado en potencia.
- Un problema concreto a resolver.
- Una demanda recurrente.
- La falta de buenos competidores.
Estos factores contribuyeron a que la oferta de Fusion Books resultara más atractiva, ganara popularidad e impulsara más demanda. De hecho, llegó a convertirse en la mayor editorial de anuarios de Australia.
Las ventajas competitivas y el modelo de negocio
Pero ese crecimiento tuvo unos comienzos bastante más precarios. De hecho, partió con un préstamo de 50.000 dólares que Mel obtuvo de sus amigos y familiares para contratar freelancers que prepararan la arquitectura técnica y el sitio web de la empresa. Después de ser rechazados por varias empresas de desarrollo de software, Mel y Cliff conocieron a In-Depth (ahora Cirrena), quienes aceptaron construir el producto en seis meses.
En su primer año, la empresa consiguió 16 escuelas como clientes, y Mel estableció su primera oficina (la imprenta) en el living (sala de estar) de su madre. Mientras tanto, Cliff se encargaba de llamar a distintos colegios para promover el servicio. Cuando las escuelas pedían hablar con el manager, Obrecht cambiaba la voz para sonar mayor. Al final lograron llegar a tener 400 colegios como clientes, incluidos algunos en el extranjero. Además, organizaban eventos y meet-ups para diseñadores y otros profesionales de blogs y redes sociales con el fin de promover Fusion Books.
🚀 La evolución y el crecimiento
Pivoteando: cambio de producto, ciudad y pitch
A pesar del éxito de Fusion Books, Perkins reconoció que la plataforma no cubría todas las necesidades del diseño gráfico; varios usuarios ya comentaban que el repertorio de opciones era limitado. En este contexto, Mel y Cliff comprendieron la necesidad de una nueva plataforma que mantuviera la accesibilidad para todos y a la vez permitiera diseñar desde presentaciones académicas hasta publicaciones para redes sociales. Así nació su próximo proyecto.
Con una idea prometedora, Perkins y Obrecht enfrentaron un nuevo desafío: conseguir mayor financiamiento. En ese entonces, Perth no era un centro de inversión en tecnología, sino una ciudad minera.
En 2011, una conversación casual cambió el rumbo del proyecto. El reconocido capitalista de riesgo, educador y deportista de Silicon Valley, Bill Tai (que en su momento respaldó a TweetDeck -ahora X Pro- y Zoom), llegó a Perth para "ser jurado en una competencia de startups"…(🙄 en realidad para surfear las legendarias olas). Durante el evento, Perkins y Obrecht presentaron su idea de negocio a Tai y a los asistentes, además de su visión de desplazar a Adobe y Microsoft. Utilizaron la metáfora de la pizza, en la que los folletos y las tarjetas de presentación de la empresa representaban los aderezos, analogía que resultó poco elegante, según el inversionista Rick Baker. Al final del día, Perkins y Obrecht se fueron sin capital, pero con un nuevo entusiasmo por el kitesurf.
Un almuerzo en San Francisco, USA
Sin contactos en Silicon Valley, Mel planificó un viaje a San Francisco para conectar con la única persona que conocía en la "Bay area": Bill Tai. Sin embargo, la presentación no estaba tan cuidada y ella percibió que no había interés. Lo que realmente estaba pasando es que el inversionista había estado contactando a algunos otros inversionistas usando su teléfono celular. Incluso le declaró algunas condiciones bajo las cuáles él mismo invertiría.
Mel pasó 3 meses durmiendo en el sillón en la casa de su hermano en San Francisco, asistiendo a múltiples conferencias y buscando el programador que pudiera materializar su idea. Pero la realidad es que enfrentaron más de 100 rechazos por parte de inversionistas de capital de riesgo (que veían difícil apostar por una pareja sin experiencia, sin background tecnológico y con headquarters en Australia). En Paralelo, Fusion Books seguía expandiéndose bajo el liderato de Cliff.
Kite-surfeando: moverse para conseguir inversión
La conexión con Tai los llevó a una invitación al campamento de kitesurf MaiTai Global en Maui, Hawaii, en 2012, donde participaban las figuras más influyentes del mundo tecnológico, incluidos inversionistas y ejecutivos tech que buscaban invertir en nuevas empresas. Tras varias reuniones sociales, conocieron al inventor de Google Maps, Lars Rasmussen, quién se convirtió en su principal asesor, y captaron la atención de Cameron Adams, ex jefe de diseño de Google, quien se sumó como tercer cofundador de la empresa en marzo de 2012. Con Adams como líder técnico, la empresa dio el gran salto: en su ronda inicial de financiamiento por parte de inversores privados, lograron recaudar 3 millones de dólares en dos tramos entre 2012 y principios de 2013, con una importante subvención de contrapartida del gobierno australiano.
“I learnt to kite-surf to go to a kite-surfing and entrepreneurship conference but it's a terribly dangerous sport, but when you are from Perth and have no connections in Silicon Valley the door opens a tiny crack, you do what you can to wedge it open and walk through that door” - Melanie Perkins
Inicialmente, fue Cameron Adams quien propuso el nombre “Canvas Chef” para la plataforma. Sin embargo, ante el descontento del equipo con la elección, fueron los ingenieros franceses quienes señalaron que “canvas” se pronunciaba “Canva” en francés, una sugerencia que los llevó a adoptar este nombre oficialmente.
Perfect timing: lanzamiento en el momento preciso
La startup tecnológica Canva se lanzó finalmente en agosto de 2013 en Sídney, Australia. Al instante enfrentó críticas negativas por parte de los periodistas, quienes argumentaban que no era “tan buena”. Sin embargo, había llegado en el momento perfecto y fue la propia comunidad la que impulsó su popularidad (they loved it!).
Con el auge de las redes sociales, las empresas estaban transformando la manera de conectar con sus clientes. Desde instituciones educativas hasta autores autoeditados, cada vez más personas comenzaron a preocuparse por su presencia en Internet. Canva se convirtió en una alternativa económica para obtener diseños digitales de calidad. En sus inicios, la empresa se centró en atraer a usuarios no profesionales del diseño, quienes necesitaban crear materiales de marketing y contenido visual de forma rápida y económica.
En su primer mes, la plataforma alcanzó 50.000 usuarios registrados y dos años después recaudó otros 3 millones de dólares del Founders Fund de Peter Thiel y Shasta Ventures. Para ese entonces, 600.000 usuarios habían creado 3,5 millones de diseños. Posteriormente, la empresa estableció sus operaciones en China continental y se adaptó a las necesidades del país asiatico con servicios de mensajería local y códigos QR. Incluso empresas de renombre como McDonald 's China y una destacada agencia inmobiliaria comenzaron a utilizar el software.
El crecimiento: multiplicando el tamaño e impacto
Entre 2014 y 2015, Canva creció de 1 millón a 6 millones de usuarios activos, recaudó 15 millones de dólares en una Serie A y alcanzó una valoración de 165 millones de dólares. Para 2016, Canva logró su primer hito como equipo al alcanzar las 100 personas, distribuidas entre Sídney y Manila (Filipinas). Dos años después, con alrededor de 500 empleados, Canva abrió oficinas en Londres y Los Ángeles.
Además, adquirió Zeetings (plataforma para crear presentaciones interactivas) con el fin de continuar desarrollando el producto y ampliar su rentabilidad, lo que permitió llegar a los más de 300.000 clientes de pago (Canva Premium). Con el lanzamiento de la aplicación para teléfono y de Canva Print (servicio que permite que los usuarios recibir sus diseños impresos en casa), junto con el software ya disponible en más de 100 idiomas, la empresa consolidó su presencia en mercados internacionales y reforzó su misión de invitar a diseñar a las personas en todo el mundo.
Durante 2019, Canva generó 105 millones de dólares en ingresos y además recaudó 60 millones de dólares en una ronda de financiamiento Serie E (donde participaron Sequoia Capital, Tiger Global Management, Blackbird Ventures y Bessemer Venture Partners), lo que elevó su valoración a 6 mil millones de dólares y permitió la contratación de talento adicional y el lanzamiento de nuevas herramientas, como creación de vídeos y funciones avanzadas.
En mayo del mismo año adquirieron Pexels y Pixabay, dos plataformas de fotografía de stock gratuitas, lo que les permitió ofrecer a los usuarios una amplia gama de imágenes para sus diseños. Al eliminar los costos elevados de un software de diseño y de herramientas tradicionales, Canva democratizó el diseño para millones de personas que deseaban expresar sus ideas de manera visual con herramientas innovadoras y de alta calidad.
En 2020 la empresa logró atraer a una gran audiencia: profesores y estudiantes. La iniciativa Canva para la Educación permite a los docentes elaborar y llevar su propio material visual al aula sin costo. Ese año, Canva alcanzó más de 40 millones de usuarios mensuales en total.
⏳ Anticipándose al futuro
Canva y la IA
El 2021, otra inversión anticipada de Canva empezó a dar sus frutos: la Inteligencia Artificial (IA). Con la entrada de Kaleido (2021) y la colaboración con Leonardo.Ai (2024), la plataforma ha logrado impulsar sus herramientas con ayuda de IA. Algunas de las funcionalidades más destacadas incluyen Dream Lab (permite la creación de imágenes a partir de descripciones de texto), Escritura Mágica Mejorada (ayuda a los usuarios a generar textos creativos), cuestionarios y gráficos interactivos y pizarras online (plataforma colaborativa en la que un equipo puede interactuar en tiempo real). En definitiva, Melanie visualizó cómo esta nueva tecnología agiliza los procesos y mejora las posibilidades de éxito, siendo fiel a su filosofía de “minimización de clics”.
La integración de la IA también ha llegado al proceso de contratación de Canva, dado que la empresa la utiliza para la creación de materiales visuales en la experiencia de incorporación de los nuevos trabajadores. De hecho, un 76% de los nuevos trabajadores afirmaron haber tenido una buena impresión de su nuevo rol y ponerse al día rápidamente, lo que se correlaciona con la efectividad de esta herramienta.
El impacto de Canva más allá del diseño
En 2024 el número de usuarios de Canva ascendió a cerca de 180 millones. La continua expansión de su base de usuarios, la diversificación de sus servicios y la efectiva estrategia de monetización se refleja en el aumento de aproximadamente 3.3 veces sus ingresos entre 2020 y 2024, superando los $2 mil millones de dólares en ingresos.
Sin embargo, el impacto de Canva excede al diseño. Desde 2022, Canva for Nonprofits es una iniciativa que ha apoyado a más de 585.000 organizaciones sin fines de lucro, ayudándoles a conectar con sus comunidades y promover sus causas. Este programa ofrece acceso gratuito a las funciones premium para organizaciones que necesitan crear campañas de concientización, materiales informativos e informes de impacto para ampliar su alcance.
Perkins y la compañía creen que hay suficiente recursos para resolver muchos de los problemas del mundo. De hecho han declarado tener un plan de dos pasos: convertirse en una de las empresas más valiosas del mundo y hacer el mayor bien posible. Hasta la fecha, Canva ha sido la primera empresa australiana en firmar el compromiso The Climate Pledge y, en 2022, se unió a Frontier Climate para invertir en tecnologías de captura de carbono. Además, la mayoría de sus oficinas operan con energías renovables.
“Hacer el bien es uno de los valores que mueven a Canva. Es algo en lo que muchos de nosotros coincidimos porque incide directamente en las decisiones que tomamos en todos los ámbitos de la empresa y, en definitiva, determina el verdadero impacto que Canva tiene en el mundo” - Cameron Adams (Cofundador y Director de Producto de Canva)
Los desafíos de Canva
Las críticas iniciales al producto fueron un golpe para el equipo. Algunos lo consideraban “cursi” por su excesiva simplicidad. No obstante, el trabajo posterior en la mejora del producto, la adaptación a diferentes culturas e idiomas y el enfoque en las necesidades del usuario hicieron que la plataforma emergiera como un servicio centrado en el cliente, que es lo que finalmente conquistó el corazón de su comunidad.
A pesar de su innegable éxito, todavía existen críticos que sostienen que Canva no es un sustituto de un diseñador gráfico profesional. Uno de ellos es John-Stephen Stansel, quien argumenta que, si bien Canva facilita la creación de contenido, no reemplaza la experiencia ni el valor de un diseñador gráfico. Es más, advierte que la plataforma podría estar homogeneizando el diseño, resultando en un contenido genérico y poco memorable, lo que podría contribuir a la devaluación de la profesión.
Por otro lado, Canva opera en un mercado altamente competitivo, donde enfrenta a gigantes como Adobe y Microsoft. Frente a esto, la empresa se ha diferenciado por su simplicidad, facilidad de uso y un plan gratuito que permite la colaboración en equipo y el acceso a una amplia gama de recursos de diseño que ninguna otra plataforma ofrece. En lugar de debilitar su propuesta, las adquisiciones estratégicas que ha hecho la empresa han fortalecido su alcance y diversidad de contenido.
Respecto a una posible salida a bolsa (IPO), en noviembre de 2024, Canva contrató a Kelly Steckelberg como directora financiera, quien ha ayudado anteriormente a empresas como Zoom a realizar su OPI. Aunque no hay confirmación de planes inmediatos, Melanie Perkins ha dejado claro que no le gustan las distracciones y que prefiere priorizar el crecimiento y desarrollo de la empresa sobre una salida a bolsa prematura.
Los desafíos actuales para Canva incluyen seguir innovando, mantenerse única en el mercado y enfrentar a competidores que intentan replicar su modelo de negocio.
💡 Take-away: ¿La Conclusión Rebel?
Con su interfaz intuitiva y una amplia biblioteca de plantillas y recursos, Canva ha transformado la manera en que millones de personas crean contenido visual, independientemente de sus competencias. Sin embargo, su historia e impacto trasciende al negocio e ilustran 3 reflexiones para personas en posiciones de liderazgo:
1. Cuando el liderazgo en pareja es una ventaja competitiva. Mel y Cliff han navegado un camino único como co-fundadores y socios de vida. Su historia revela las ventajas y los desafíos de crear un unicornio con tu pareja y cómo han logrado compatibilizar su relación con las demandas del negocio. No es una historia de amor, es un ejemplo de alineación.
Se conocieron mientras estudiaban en la universidad y se hicieron multimillonarios juntos. Trabajaron haciendo tatuajes con aerógrafo y poco después se asociaron para fundar su primer proyecto en 2006. Cliff le propuso matrimonio a Melanie en 2019 durante un viaje a Capadocia, Turquía. Se casaron en la isla de Rottnest en 2021 y en 2022 tuvieron su primer hijo.
Uno de los consejos más reconocidos en el mundo startup es: "que tu business partner tenga complementariedad en habilidades y en personalidad". Lo que distingue al "duo Canva" es la claridad en los roles. Mel, perfeccionista y visionaria como CEO vs. Cliff, operativo y pragmático como COO. Cuando no hay zonas grises ni egos compitiendo, el resultado es que las decisiones se toman más rápido y con menor fricción. La métrica clave no es que están casados, sino que multiplicaron su efectividad dividiendo el trabajo e integraron fuerzas que trascienden a 2 roles. La eficacia de este co-liderazo se basa en sus diferencias.
Porque colaborar radicalmente requiere cultivar un respeto mutuo por la singularidad de la otra persona.
2. Resolver una necesidad básica que el mercado ignora. Cuando Mel observó a las personas frustradas con software de diseño complejos, logró ver a millones de personas auto-excluidas de la comunicación visual. Usuarios que necesitaban generar diseños, pero sin pasar por un doctorado en Adobe o Photoshop. Un fenómeno muy profundo: las herramientas existentes no sólo eran difíciles de usar, sino que generaban una barrera de adopción entre el usuario y su potencial expresivo.
Creemos que lo revolucionario de la visión de Mel fue la nueva promesa implícita que articuló para los usuarios: diseño simple para todas las personas minimizando clics. Con esto, logró que "la herramienta de diseño desapareciera en su uso" (debido a su simplicidad) para que toda la atención del usuario se dirija al diseño creativo. Mientras Adobe optimizaba para el 1% de profesionales, Canva capturó el otro 99%. Mirando en retrospectiva, un mercado supuestamente maduro estaba en la infancia.
Aunque las críticas iniciales eran predecibles, Mel logró ser ampliamente reconocida por su capacidad de tomar feedback de los usuarios. De hecho, la rápida expansión de Canva fue en gran parte impulsada por personas que amaban el producto y lo compartían.
Más que democratizar el diseño, creemos que Canva democratizó la confianza creativa. Y esa es una disrupción "next level".
“We want Canva to be empowering every single person in the world to design” - Melanie Perkins
3. Fortaleza a largo plazo sobre ganancias a corto plazo. La decisión de Canva de dedicar dos años a construir una plataforma tecnológica robusta, incluso antes de su lanzamiento, es la antítesis del típico mantra "move fast and break things" y del himno favorito de las aceleradoras: "MVP, MVP, MVP" (producto mínimo viable).
En la cultura de iteración rápida, la presión que enfrentan los líderes para avanzar rápidamente es brutal. Sin embargo, los fundadores de Canva priorizaron construir las bases sólidas que pudieran soportar el crecimiento. Comprendieron que la velocidad sin estructura tiene alto riesgo de fracaso y decidieron estar dos años sin la dopamina de la agilidad.
Su expansión en uso de IA sigue el mismo playbook: inversiones anticipadas que crean "ahorros relevantes". No es paciencia por paciencia.
Para Canva la paciencia no es una virtud, es una estrategia calculada para maximizar valor a largo plazo.
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La historia de Melanie Perkins en Canva ilustra que se necesita el esfuerzo de una tribu para crear un unicornio.
🕵️ Algunos datos interesantes ¿Sabías qué?
- Perkins tuvo que aprender a hacer kitesurf para conectar con inversionistas un año después de la creación de Canva. Cuando todavía no había ingresado al mercado, Perkins y Obrecht asistieron al campamento de kitesurf MaiTai Global, el Lolapalloza de los inversionistas donde lograron cerrar una ronda de financiamiento de 3 millones de dólares.
- Los actores Owen Wilson y Woody Harrelson invirtieron 15 millones de dólares en la Serie A de Canva en una ronda que incluyó a otros inversionistas de renombre, como el cofundador de Google Maps, Lars Rasmussen.
- Canva formó una alianza con FedEx durante la pandemia para mejorar la comunicación visual de las empresas. En 2020, Canva se asoció con la compañía de logística estadounidense para crear un mercado digital de diseño para impresión, facilitando a las empresas la creación de materiales impresos de manera profesional. Esta colaboración ayudó a las empresas a enfrentar sus recursos limitados y a reconectar con clientes.
- You Print, We Plant: la iniciativa consiste en plantar un árbol cada vez que se realiza un pedido de impresión. Hasta la fecha, han contribuido a la reforestación con más de 5 millones de árboles en distintos lugares del mundo.
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🙏 Agradecimientos
Gracias Alejandra Winter por tus reflexiones y perspectivas en este artículo.
